Día Conmemorativo de los Niños

Estimado miembro de la comunidad,

Hoy es el Día Conmemorativo de los Niños, una celebración que exige que la Bandera Conmemorativa de los Niños ondee en todo el estado en memoria de las vidas perdidas debido a la violencia contra los jóvenes.

Tengo el privilegio de hablar en un evento de izamiento de bandera hoy en el Palacio de Justicia de Santa Cruz, organizado por Children's Network, el Departamento de Servicios Humanos del Condado de Santa Cruz y la División de Servicios para Niños y Familias del Condado.

Este izamiento de bandera nos invita a considerar el trabajo de “construir juntos futuros esperanzadores”, incluso mientras conmemoramos a las víctimas de la violencia. Como les comparto hoy, este es un proyecto de importancia apremiante y personal que veo a través de tres lentes: como educador, padre y sobreviviente.

Como educador, me centro en el doble papel de nuestras escuelas tanto en la educación como en el bienestar. Las escuelas no son sólo lugares de aprendizaje; son santuarios donde los niños deben sentirse seguros y apoyados. Es nuestra responsabilidad, legal y moralmente, garantizar que el personal esté alerta, capacitado para reconocer los signos de abuso y equipado para actuar. También trabajamos para enseñar proactivamente a nuestros estudiantes sobre seguridad personal y límites saludables.

Como padre, sé que la seguridad de nuestros hijos comienza en casa. Debemos crear entornos acogedores donde los niños sean libres de expresarse y buscar ayuda sin miedo. Los padres y cuidadores desempeñan un papel crucial en la enseñanza de la autonomía corporal y el seguimiento de las interacciones, tanto en línea como fuera de línea.

Y como sobreviviente de abuso infantil, hablo desde un lugar de comprensión personal. Comprender que nos rodean sobrevivientes y que las cicatrices del abuso no siempre son visibles. Sé de primera mano que el camino hacia la curación es largo y sinuoso, y también que de estas experiencias puede surgir un compromiso personal con la defensa y el cambio.

Cada año, 1 de cada 7 niños en los EE. UU. sufre abuso y negligencia infantil, y es casi seguro que esta estadística es un recuento insuficiente porque muchos casos de abuso no se denuncian.

Ya sea usted educador, padre, cuidador, sobreviviente o defensor, lo invito hoy a unirse a nosotros en la reflexión sobre la tragedia de las vidas perdidas y nuestra esperanza de construir un futuro más seguro para nuestros niños.

Para obtener más información sobre cómo identificar y denunciar el abuso y la negligencia infantil, visite el Sitio web de Servicios de Protección Infantil del Condado de Santa Cruz.

Suyo en educación y equidad,
Dra. Faris Sabbah
Superintendente de Escuelas del Condado